La oración subordinada (= „der Nebensatz») necesita una oración principal para tener sentido.
Mientras en la oración principal el verbo conjugado ocupa la segunda posición, en la oración subordinada el verbo conjugado va al final.
Muchas oraciones subordinadas necesitan una conjunción subordinante (als, bevor, dass…). A continuación se presentan algunos ejemplos:
Si la oración subordinada va delante, la oración principal comienza por el verbo (se considera que la oración subordinada ocupa la primera posición):
No hay más remedio que estudiarse las conjunciones subordinantes.
En alemán no utilizan las mismas formas verbales que en español, por lo tanto, hay que fijarse en cada caso qué formas utilizan.